Thursday, April 25, 2013

Perspectivas de competencia e innovación: China – México


“Si ya sabes lo que tienes que hacer y no lo haces, entonces estás peor que antes.” —Confucio.

RECIENTEMENTE EL presidente de México, Enrique Peña Nieto, realizó una gira por el este asiático. En las publicaciones oficiales de la presidencia, mencionaban que México consideraba a China y a Japón como aliados. Pero parece que a algunos medios chinos les pareció algo distinto. Y en parte, porque el gobierno de México ha contaminado la relación diplomática y comercial por muchos años. Muestra de esto, es que México participa en forma entusiasta en las negociaciones del Tratado Trans-Pacífico beneficiando a que Japón ingrese a este bloque comercial promovido por Estados Unidos, y que es, en realidad, un tratado internacional para aislar comercialmente a China.

Ahora bien, es común entre empresarios y políticos mencionar a China como fuente de muchos de los problemas de competencia tanto fuera (principalmente en Estados Unidos, destino de aproximadamente 80 por ciento de nuestras exportaciones), como dentro del país. Encontramos comentarios que van desde mano de obra barata, país de maquila, esclavitud, competencia desleal, manipulación del valor de su divisa, contrabando de mercancías, piratería y cuantas prácticas abusivas se le puedan acomodar. En parte todo eso es cierto, pero, en realidad, ¿en México estamos haciendo nuestra parte para mejorar la competitividad?

El Banco de México está empeñado en aumentar el valor del peso, con el argumento de que nuestro país no debe sostener su crecimiento económico ni sus exportaciones mediante valores subvaluados del peso. Una pregunta básica es ¿por qué Estados Unidos, Japón, Reino Unido y la Zona Euro sí quieren mantener sus divisas subvaluadas para soportar su crecimiento económico y aumentar sus exportaciones?

Por otro lado, el actual gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, cuando fue secretario de Hacienda, no propuso estímulos o incentivos fiscales a la innovación. Por el contrario, propuso estrangular a las empresas mediante el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) para erosionar su liquidez (flujo de efectivo). Desde entonces, el flujo de efectivo para las empresas ha sido una papa caliente, de la cual deben deshacerse en el mismo mes que la reciben, porque de lo contrario esos recursos financieros serán confiscados por el fisco, lo que hace más difícil la sobrevivencia de las empresas.

Otro tema pendiente, en cuanto a competitividad, es que para la clase política la economía ilegal, llamada informal, es un negocio financiero y político. De ahí obtienen recursos en forma ilegal que son destinados a fines personales, electorales, grupos de choque. Entonces la competencia desleal es promovida desde el aparato del gobierno municipal, estatal y federal. Mientras las personas de la economía ilegal no pagan impuestos, en la economía formal pagan impuestos y demás extorsiones a los que se ven obligados para mantener sus negocios operando. El señor Carstens, como secretario de Hacienda, tampoco hizo algo para aumentar la base tributaria y reducir la economía ilegal.

Por sus acciones, pareciera que el Banco de México se interesa en proteger los intereses de elites financieras nacionales y extranjeras, lo que nos muestra que su modelo favorece a una economía financiera y no a una economía industrial. Recordemos que la creación de riqueza está en la producción de bienes y servicios útiles para la personas, no en los negocios financieros que no producen riqueza sino que únicamente se enfocan a transferir la riqueza de quienes la producen a quienes controlan la creación del dinero y del crédito.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-abr24/

No todo es lo que parece


“Es todo tan sencillo, Anjin–san, sólo cambia tu concepto del mundo.” —Shogun de James Clavell.

Hace poco más de una semana, le decía a un buen amigo que a pesar de la popularidad y los buenos augurios de algunos especialistas con los que comparto algunos puntos de vista, algo en Bitcoin (BTC) no me gustaba del todo.

Bitcoin es una divisa digital, cripto-divisa, que se ha hecho popular porque no depende de algún gobierno, tampoco de los bancos, ofrece cierto anonimato, los costos de transferencia son muy bajos, y no puede generarse la inflación convencional, es decir, aumentar la cantidad de Bitcoins a discreción, sino que su suministro estará limitado hasta 2040 cuando alcanzaría su número máximo de 21 millones de Bitcoins. Sin embargo, el precio puede ser muy volátil e inflarse como una burbuja. Bitcoin se ha convertido en un refugio y una bandera de rebeldía contra el sistema monetario y el sistema bancario mundiales; de tal forma que algunos grupos autodenominados libertarios piensan que Bitcoin los reemplazará.

El primero de enero de este año, Bitcoin tenía un precio de 13.55 dólares. Poco a poco venía incrementando su precio, pero después de la confiscación de cuentas bancarias en Chipre se aceleró. El miércoles 10 de abril, la semana pasada, Bitcoin alcanzó su precio máximo por encima de los 260 dólares, pero ese mismo día caería a 105 dólares, se volvería a recuperar por arriba de los 200 dólares, para después volver a bajar a unos 130 dólares, todo esto en un solo día. En los días siguientes el precio oscilaría con una tendencia a la baja, y ahora, noche de martes, el precio se encuentra alrededor de los 70 dólares.

Así es como la divisa digital más popular, y símbolo de la libertad para algunos, ha mostrado su vulnerabilidad a la especulación. Personas que convirtieron sus ahorros en Bitcoins cuando el precio era alto, han perdido una parte significativa que difícilmente recuperarán en el corto plazo. Lo mismo aplica para las demás cripto-divisas que existen y compiten con Bitcoin.

Enfrentarse al sistema bancario y al sistema monetario no es cosa menor. Estos sistemas harán todo lo posible para evitar que se reduzca su oligopolio sobre la creación y control del dinero y del crédito. Y muestra es esto es el ataque que inició el viernes pasado hacia los metales preciosos que provocó la caída en su precio.

Ahora bien, en metales preciosos básicamente hay dos formas de invertir; una es adquirir metales preciosos (físicos) y otra contratos (papel) sobre derivados financieros, acciones… Los precios que se publican son para el papel, futuros, que en la mayoría de las veces no buscan convertir este contrato en el metal, sino únicamente tener una ganancia financiera. Según Antal Fekete, la base del oro no se puede manipular, ya que el oro físico comprado en efectivo es más costoso que el contrato a futuro de oro más corto (manipulable).

¿Cómo se puede explicar que el precio de un producto disminuya si la demanda ha aumentado considerablemente (en la plata física hay 50 compradores por 1 vendedor), los inventarios están en mínimos históricos y el suministro (oferta) no ha crecido para satisfacer la demanda; incluso se percibe que se está racionando la entrega de los metales físicos? Según las reglas de la oferta y la demanda, en un mercado libre, el precio debe aumentar, pero está ocurriendo precisamente todo lo contrario. Aquí es donde viene la desconexión del mercado de papel con el mercado de los metales físicos.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-abr17/

Inversiones en nuevos negocios y el capital de riesgo corporativo


“Hay escasez de grandes ideas y de emprendedores, no de capital.” —Jeffrey Glass, emprendedor e inversionista de capital de riesgo

En ocasiones escuchamos en discursos políticos muchas promesas para diversificar una economía regional para no depender de una sola actividad económica; también escuchamos con frecuencia que es necesario reactivar la economía interna, crecer el mercado nacional; o bien, nos dicen que las empresas deben innovar para construir ventajas competitivas, ofrecer mayor valor agregado, y así generar más empleos con mejores salarios.

Pero muchas veces, empresarios y emprendedores se quedan esperando que el político que hizo las promesas, las cumpla. Y así pasa el tiempo, llegan nuevos competidores más audaces, o los clientes se van a otros lugares donde los atienden mejor, la oportunidad de negocio pasa y se va. Es curioso, que un empresario quiera total apoyo del gobierno, pero no es la tarea del gobierno estimular la economía o ayudar a que las personas hagan negocios. Si el gobierno brinda apoyos económicos, qué bueno, pero no se debe esperar que el gobierno se haga cargo de todo.

Imaginemos que en la prehistoria quien inventó la rueda estuviese esperando que el gobierno le diera subsidios, financiamiento o cualquier apoyo para comenzar a trabajar en su aventura. En ese entonces no había gobierno como lo que existe hoy. Fue la necesidad, la urgencia, la que estimuló la creatividad para inventar un artefacto que detonó el desarrollo de la humanidad. Lo mismo con el fuego. El ser humano es el único ser vivo en el planeta que cocina su comida. Comer carne cocida aceleró su desarrollo. La necesidad es la madre de todas las inversiones, dicen por ahí.

Por lo tanto, si un empresario o emprendedor, que no pertenezca a las elites políticas y empresariales privilegiadas, quiere prosperar y crecer sus negocios, no lo podrá hacer si se queda esperando que el gobierno le resuelva todo. Es necesario ser audaz y aventurarse, experimentar —prueba y error—, pero claro, también puede aprender de la experiencia de otros. Es necesario invertir recursos económicos y financieros (tiempo, dinero y esfuerzo), para llegar a donde quiere llegar. A menos que le guste estar sujeto a los azares del destino.

En países inclinados a la innovación existe, además de los inversionistas ángel y los fondos de capital de riesgo, el llamado capital de riesgo corporativo (Corporate Venture Capital). Recordemos que el fundamento del capitalismo es el capital, no la deuda (crédito). Al capital de riesgo se le considera el ratoncito que cambió el mundo, porque fue por inversionistas ángel, fondos de capital de riesgo y capital de riesgo corporativo que surgieron no únicamente empresas innovadoras, sino que surgieron nuevos sectores tecnológicos, que los bancos jamás les darían algún crédito. El capital de riesgo ofrece recursos financieros y toda una gama de relaciones, experiencia, asesoría, recursos humanos especializados y desarrollo corporativo que no puede ser obtenido fácilmente.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-abr10/

Cuando el Estado asedia y despoja la riqueza de su población


“Dame el control del dinero de una nación y no me importará quién haga las leyes.” —Frase atribuida a Mayer Amschel Rothschild (1744-1812), fundador de una dinastía mundial de banqueros.

Tal vez a algunos les parezca una teoría de conspiración, a otros les parecerá exagerado y cercano a la ficción, quizá algunos académicos digan que jamás se repetirán los errores del pasado, y también se podrán escuchar voces que digan que debido a la fortaleza de los bancos en México se descarta que esto pudiera ocurrir en México. Sin embargo, a lo largo de la historia se ha visto que la realidad supera a la ficción y que si ocurrió una vez, muy probablemente volverá a ocurrir. La muestra más reciente es Chipre, e igual las medidas ya consideradas y que forman parte de los planes del G20 para “estabilizar” el sistema bancario en los países miembros.

Se entiende que el objeto central del Estado, ya sea Ciudad-Estado o Estado-Nación, es la de proteger y defender a su población y la propiedad de la misma de las acciones de los poderes fácticos (generalmente delincuentes). Para esto, se establece un marco legal sobre derechos y sobre el uso de fuerza, y tiene así el Estado el monopolio del uso de la fuerza (poder por derecho a través del ejército, marina, policía) dentro del mismo marco legal para asegurar el cumplimiento de las leyes del Estado.

Asimismo, el Estado tiene instituciones que administran los recursos y regulan las actividades de la población y empresas, otras que legislan y otras que tienen a su cargo el juzgar las acciones de las personas cuando se considera que se han violado los derechos de otros o han actuado contra el Estado. Sin embargo, la lucha entre el poder por derecho del Estado y el poder fáctico de algunos grupos es constante, pero, lamentablemente, la población es la más perjudicada cuando miembros del Estado se coluden con los poderes fácticos para secuestrar al Estado para su propio beneficio.

¿Por qué es tan importante lo que ocurre en un país tan pequeño como Chipre? Para muchas personas le es difícil localizar a este país en un mapa. Pero lo que ocurre en Chipre es una muestra de cómo el Estado ha asediado y despojado la riqueza de su población. El Estado fue secuestrado por poderes fácticos. Primero se dijo que lo que había ocurrido en Chipre era algo extraordinario, una medida casi desesperada. Pero según la directiva de la Comisión Europea, lo que pasó en Chipre es un modelo de rescate financiero que puede aplicarse a otros países. Esta situación no se limita a la Zona Euro. Canadá ya ha propuesto un plan para utilizar los depósitos de la población para rescatar sus bancos más importantes si llegase a requerirse. Nueva Zelanda tiene en la mira esta misma opción.

Al parecer la opción de utilizar los depósitos de la población y de extranjeros en un país para rescatar a los bancos que se la han pasado jugando al casino de los derivados y a la impagable deuda soberana no es algo extraordinario, o una medida desesperada. En un artículo elaborado por la Federal Deposit Insurance Corporation de los Estados Unidos y el Banco de Inglaterra del 10 de diciembre de 2012, muestra que esta opción ya ha sido platicada por mucho tiempo. De hecho, la confiscación de depósitos en los bancos es parte de las conversaciones del Consejo de Estabilidad Financiera del G20 asentado en Basilea, Suiza. Recordemos que México es miembro del G20. Por cierto, el reporte de recomendaciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos al Consejo de Estabilidad Financiera del G20 ya no está disponible en su página de internet.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-abr03/

La realidad maquillada, el rey desnudo y algunas ideas productivas


“Estamos todos condenados, pero eso no significa que no podamos hacer dinero en el proceso”. —Marc Faber, Dr. Doom, inversionista de la Escuela Austriaca de Economía (1946-).

Hace muchos años, en un reino lejano, vivía un rey que gastaba su fortuna en vestuario. Se deleitaba en la elegancia y la exclusividad de sus prendas. Un día escuchó a dos charlatanes decir que podían fabricar la tela más suave, ligera y delicada que jamás se pudiera imaginar. Esta tela sería invisible para la gente estúpida, sólo las personas inteligentes podrían verla. Por lo tanto, el rey les pagaría lo que fuese por obtener preciados diseños con esa tela invisible. Les pidió un traje ya que el precio era muy elevado.

Sintiéndose algo nervioso acerca de si él mismo sería capaz de ver la prenda, el rey envió primero a dos de sus hombres de total confianza a ver el traje nuevo. Evidentemente, ninguno de los dos admitieron que eran incapaces de ver la prenda y comenzaron a alabar su sabia decisión por haber elegido esa tela. Los miembros de corte habían escuchado hablar del fabuloso traje y estaban deseando comprobarle al rey que no eran estúpidos.

Así, llegó el día de la celebración para que el rey estrenara su nuevo traje. Los estafadores hicieron como que le ayudaban a ponerse la inexistente prenda y el rey salió con ella en un desfile con todo su esplendor por el palacio; el rey no podía admitir que no veía el traje. Toda la corte alabó enfáticamente el traje, le hablaban de su grandeza como rey, pues eran temerosos de que los demás se dieran cuenta de que no podían verlo, hasta que un niño que se había escabullido dentro de la corte, gritó: ¡Pero si el rey está desnudo! …en ese momento la farsa terminó.

Esta historia se usa en política para referirse a cualquier verdad obvia negada por la mayoría a pesar de la evidencia, especialmente cuando es proclamada por el gobierno. Esto mismo aplica a la situación económica que estamos viviendo a nivel mundial actualmente. Los medios masivos de comunicación nos dicen que todo está bien, nos dicen que el rey tiene todo un ajuar de prendas elegantes y exclusivas con una tela mágica que únicamente los economistas expertos y los conocedores inteligentes pueden ver.

La realidad es que hay varios reyes desnudos, y habrá más en los próximos años. Uno de los reyes desnudos es el sistema bancario mundial. Gran parte de los grandes bancos del mundo son insolventes. Ningún banco en el mundo puede resistir el retiro masivo de depósitos. Adicional a esto, debe tenerse en cuenta la contabilidad fraudulenta. Por ejemplo, es bien conocido que bancos en China, para mostrar que cumplen con la regulación de finanzas sanas, en días previos a la realización de los reportes obligatorios, transfieren en forma masiva depósitos de sus clientes que estaban en otros instrumentos de inversión, manipulando sus estados contables. Al pasar la fecha de reporte, ese dinero es regresado a los instrumentos de donde los retiraron. Otra versión de la contabilidad fraudulenta es cuando los bancos esconden sus pérdidas, situación que es una práctica habitual en la banca mundial. Los reguladores dicen que sí ven la ropa mágica del rey, entiéndase la llamada solidez de los bancos.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-mar26/

Saturday, March 23, 2013

De la geopolítica y los metales preciosos hasta tu bolsillo


“A la mente moderna le disgusta el oro, porque deja escapar verdades incómodas.” —Joseph Schumpeter, economista de la Escuela Austriaca, 1883-1950.

El 22 de agosto de 1944, los 44 países aliados ya veían que estaban ganando la Segunda Guerra Mundial, y se dispusieron a organizar el nuevo sistema financiero internacional. Firmaron diversos acuerdos que constituyeron el Sistema Bretton Woods, que dio origen al Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Internacional de Reconstrucción y Desarrollo, ahora parte del Grupo del Banco Mundial. Se marca así el inicio de lo que sería la Pax Americana, similar a la Pax Romana, y la finalización del imperio británico, que al igual que la mayoría de países europeos, americanos y asiáticos, aliados y adversarios, tenían y tendrían grandes deudas con Estados Unidos.

Entre los acuerdos se establecía que el dólar americano (USD) sería la moneda de referencia, y la única convertible en oro a razón de 35 dólares por 1 onza troy (31.103 gr) de oro con pureza 0.9999 (no estoy seguro si las 9 diezmilésimas ya se utilizaban en 1944), que es cercano a los 24 quilates. Legalmente para el gobierno de Estados Unidos este precio aún es vigente. Las demás divisas ya no regresaron al patrón oro.

Al pasar de los años, Estados Unidos mantenía su guerra con Vietnam, que ya no podía financiar. Por lo tanto, comenzó la expansión monetaria (imprimir dinero), para sufragar sus gastos bélicos, que provocó la devaluación de su moneda. Las guerras son los procesos más inflacionarios que existen, con capacidad para extraer la riqueza de poblaciones de países ajenos a los conflictos.

Ante esta situación, la conversión de dólares de reserva al oro que respaldaba al dólar se aceleró. Pero el detonante fue cuando Francia solicitó la conversión de una gran cantidad de dólares por oro. Entonces, el domingo 15 de agosto de 1971, el presidente Richard Nixon ordena la suspensión temporal de la convertibilidad del dólar en oro. A casi 42 años, la suspensión temporal continúa vigente. Desde ese momento todas las divisas del mundo se convirtieron de facto en dinero fiat, y se liberó de cierta forma el precio del oro.

Posiblemente te estés preguntando qué tiene que ver esta historia aburrida de otros países con tu bolsillo. Bueno, esta historia tiene que ver con la intervención de los gobiernos en los precios, incluidos tu sueldo (salario mínimo), tasa de interés de tus ahorros y, por supuesto, el precio de metales preciosos como el oro y la plata. Incluso en algunas ocasiones, los gobiernos han llegado a la confiscación de propiedades, metales preciosos y ahorros como ya sucedió en Estados Unidos en abril de 1933 y estuvo a punto de ocurrir en Chipre estos días.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-mar20/

Thursday, March 14, 2013

Aumento de impuestos y represión financiera


“La inflación es la única forma de tributación que se puede imponer sin legislación.” —Milton Friedman, Premio Nobel de Economía en 1976.

En 1973, los economistas Edward S. Shaw y Ronald I. McKinnon de la Universidad de Stanford introdujeron el concepto “represión financiera”, que consiste en medidas tales como préstamos directos al gobierno, topes a las tasas de interés, la regulación de los movimientos de capitales entre los países y una asociación más estrecha entre el gobierno y los bancos.

En 2011, los economistas Carmen M. Reinhart y M. Belen Sbrancia hicieron una hipótesis en un documento de trabajo titulado “Liquidación de Deuda del Estado” que los gobiernos podrían volver a la represión financiera para hacer frente a la deuda tras la crisis económica de 2008. Reinhart y Sbrancia incluyeron además de las medidas mencionadas, la de otorgar créditos directos a ciertas industrias.

A estas medidas podríamos agregar la de otorgar garantías de protección crediticia a ciertas industrias, como está ocurriendo estos días en el sector de construcción de vivienda. Por ahora, el gobierno federal otorga una garantía de que pagará el 30 por ciento de los créditos que no les sean pagados a las entidades que otorgaron un crédito para vivienda nueva.

Esto significa que el gobierno federal estimula a las entidades financieras a tomar mayores riesgos porque saben que están protegidas. A esto se le llama “moral hazard”, riesgo moral. El riesgo moral es una invitación a que las personas de la entidades financieras asuman mayores riesgos cuando las posibles consecuencias negativas de sus actos no son asumidos por ellos ni por las entidades financieras, sino por un tercero, en este caso, la población mexicana.

La oferta del gobierno federal hacia estas entidades financieras es tentadora para ellas porque, sus ganancias son exclusivamente para ellas, y las pérdidas son para toda la población mexicana, la socialización de las pérdidas. La población mexicana pagará con su trabajo las pérdidas, ya que sus ingresos estarán sujetos a más impuestos y mayor pérdida de poder adquisitivo por la devaluación del dinero fiat (inflación) y la represión financiera.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-mar13/

Dinero social, indeseable para quienes concentran la creación de dinero y el comercio


“Él (Carl Menger) argumentaba que el lenguaje fue desarrollado por la misma razón que el dinero, facilitar la interacción entre las personas. Decía que eran desarrollos ‘orgánicos’. Ni el lenguaje ni el dinero fueron desarrollados por el gobierno.” —Extracto de la biografía de Carl Menger, fundador de la Escuela Austriaca de Economía, en Library of Economics and Liberty.

Desde una perspectiva del desarrollo de la humanidad hasta hace unos siglos, el dinero había sido libre. Fue creado, regulado y descartado por las sociedades desde miles de años antes de su forma actual. Ha convivido desde tiempos remotos con el trueque y el crédito (algunas veces con intereses y otras sin intereses). El dinero primeramente fue basado en varas, conchas, ganado, alimentos, entre otras mercancías (commodities) que eran escasas; después conforme avanzaba el desarrollo de las sociedades, el dinero pasó a los metales preciosos, y éstos poco a poco fueron suprimidos para llegar al actual dinero fiat, que es visible en monedas de metales industriales y billetes de papel, plástico o algodón, pero la mayor parte del dinero del mundo son bits en computadoras.

Por su origen, hablar de dinero social debería ser redundante pero en la actualidad, el dinero social es, para algunos, símbolo de libertad y justicia, y para otros algo que se debe eliminar y sus promotores encarcelados, porque rompe con el stablishment.

Sin embargo, el dinero social, o monedas complementarias, vuelcan a las comunidades a una mayor integración no sólo comercialmente hablando sino también en lo social, al aumentar la confianza mutua y fortalecer la cohesión y el tejido social. Tal vez, esto pudiera asustar a la clase política, ya que muchos integrantes de la misma buscan su fortaleza en la división de la sociedad, y su dependencia a las entidades de gobierno o afiliación a organizaciones de activismo político.

En México es ilegal que la gente, ciudadanía, participe de la creación de dinero, porque por derecho el Banco de México es la institución a cargo de la creación del dinero en México. Sin embargo, en la realidad, también los bancos crean dinero cada vez que otorgan un crédito. Nadie más puede, legalmente, crear dinero. Cada vez que se otorga un crédito se crea dinero hoy pero es dinero que será generado en el futuro. El dinero fiat es inflacionario, se crea de la nada, se cobra interés por ese dinero y de devalúa intencionalmente. El mismo dinero fiat al ser creado por el Banco de México, lo hace como deuda.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-mar06/

La importancia de la conciencia de la actualidad económica

“El poder reside en el tipo de conocimiento que uno posee. ¿Qué sentido tiene conocer cosas inútiles? Eso no nos prepara para nuestro inevitable encuentro con lo desconocido…” Las enseñanzas de Don Juan por Carlos Castaneda.

Podría parecer obvia la importancia de aprender a administrar las finanzas personales, conocer cómo funciona el sistema financiero nacional, e inclusive el internacional, tener la capacidad para distinguir entre las diversas opciones de financiamiento e inversión al alcance desde la perspectiva personal, ser consciente de cómo funcionan las variables y las estadísticas básicas de la economía. Sin embargo, es necesario ir un poco más allá del conocimiento puramente financiero. Es decir, el tema del dinero y su administración.

La economía tiene una dinámica social, ya que son las personas que toman las decisiones, pero también política, y sujeta a la corrupción. Los gobiernos de las principales economías del mundo tienen un banco central aparentemente autónomo, que fija las tasas de interés de referencia y la política monetaria, y estos gobiernos a través de sus programas definen hacia dónde dirigen el gasto público, y por lo tanto qué sectores serán beneficiados con financiamiento barato o sin costo, a fondo perdido, subsidios, entre otros. En términos prácticos, este enfoque es una economía de planeación central, no una economía de libre mercado como tanto nos han querido convencer por muchos años. Y como no hay torta gratis, la población termina pagando estos gastos no sólo en impuestos, sino también en otro impuesto que no aparece en la legislación fiscal, que es la inflación, es decir la expansión monetaria que genera la pérdida de poder adquisitivo de nuestros sueldos y ahorros.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-feb27/

Wednesday, February 20, 2013

¿Qué opciones existen para protegerme ante la devaluación generalizada de divisas?


“El oro es dinero, cualquier otra cosa es crédito.” —J.P. Morgan, banquero (1837-1913).

POR EL momento el peso mexicano se encuentra “sobrevaluado”, sin embargo, a pesar de este hecho, estamos experimentando, por un lado, alzas en los precios de los alimentos, energéticos, combustibles y otros productos básicos; por otro lado, adquirimos productos más pequeños, generalmente el empaque es del mismo tamaño de costumbre pero el contenido (peso o volumen) ha sido reducido, o bien, se ofrecen productos con ingredientes distintos a los que normalmente contenían los productos. Por ejemplo, en Europa se ha desatado toda una controversia porque han cambiado la carne de ternera por carne de caballo. Pero debido al alto precio de la ternera, una parte de los consumidores sólo piden que se etiquete la carne de caballo como ingrediente, y no les mientan. Al parecer estas situaciones se mantendrán no únicamente para los próximos meses, sino que pueden incluso permanecer por varios años.

Otro factor, real o mediático, para el incremento de precios en los alimentos son desde la aparición de enfermedades en ganado, aves o cultivos, sequías, pérdidas de cultivos por plagas o inundaciones, hasta la especulación financiera y las devaluaciones intencionales por la guerra de divisas.

De lo mencionado en los párrafos previos no tenemos control alguno como consumidores. Son situaciones ajenas a nuestra capacidad de toma de decisiones. Pero sí tenemos capacidad de decisión sobre nuestros ingresos, gastos, deudas, ahorros e inversiones que podríamos realizar. Si nos gusta el capitalismo, debemos comprender que el capitalismo comienza por los ahorros, pasando por la inversión para generar la acumulación de capital, se producen bienes y servicios que más adelante serán consumidos. El capitalismo consiste en la creación y acumulación de capital, no en la creación y acumulación de deuda. El dinero fiat no es capital, es deuda, y en esencia es inflacionario, por lo que para proteger nuestro poder adquisitivo es necesario no depender únicamente de inversiones financieras con rendimientos superiores a la inflación, sino también contar con inversiones productivas y activos que aumenten su precio con respecto al dinero fiat.

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-feb20/


Wednesday, February 13, 2013

¿Hacer planeación estratégica o ejecutar estrategias?


“Tenemos un plan estratégico. Se llama hacer cosas”. —Herb Kelleher.

Recuerdo que hace años cuando comencé a profundizar en el marco conceptual de las estrategias dinámicas orientadas a la acción; perdón por la redundancia, me encontré con una frase del Arte de la Prudencia de Baltasar Gracián: “Póngase a trabajar siempre sin temer a la imprudencia. Cuando la mente de quien actúa alberga miedo al desacierto, quien lo observa ya lo ve como evidencia de su fracaso… Las acciones se tornan peligrosas cuando se duda de su sabiduría; en tal caso, mejor sería no hacer nada.”

Parece contradictoria la frase al título de la obra. La mayoría de la personas hemos sido educadas (condicionadas) a ser prudentes; recordemos el dicho popular “hombre precavido vale por dos”. Sin embargo, como diría Maquiavelo en El Príncipe sobre la fortuna: “Sin duda creo que es mejor ser impetuoso que cauto, porque… si usted quiere poseerla (la fortuna), es necesario conquistarla por la fuerza; es evidente que ella se deja dominar por el audaz y no por quienes proceden con cautela.”

Para leer el artículo completo, visita: http://periodismoobjetivo.com/fiscal/af-feb13/